La antigua «ciudad hidráulica» de Asia

Todas las civilizaciones, grandes y pequeñas, necesitan el suministro de agua. El poderoso Imperio de Angkor, en la actual Camboya, no era una excepción.

Ya hemos hablado en este blog de las maravillas de los antiguos sistemas desarrollados por los incas en Perú y los mayas en Guatemala.

En los años cincuenta y sesenta, el arqueólogo francés Bernard Philippe Groslier utilizó la arqueología aérea para reconstruir el trazado de las antiguas ciudades de Angkor,  que desveló una compleja red de distribución de agua y llevó a Groslier a llamar a Angkor la «ciudad hidráulica».

Su trabajo se ha puesto al día. En 2012, el arqueólogo Dr. Damian Evans, investigador de la École Française d’Extrême-Orient, reveló la verdadera extensión del sistema hidráulico utilizando la tecnología LiDAR.

Angkor lo necesitaba. Llegó a tener alrededor de 900 000 habitantes.

¿Y qué pasó al final? Fenómenos climáticos extremos. La desaparición del Imperio de Angkor a principios del siglo XV fue un misterio durante mucho tiempo. Ahora se ha demostrado que las intensas lluvias monzónicas posteriores a una prolongada sequía en la región causaron daños generalizados en las infraestructuras que provocaron el colapso de la ciudad.

Crecimiento poblacional y fenónemos climáticos extremos. Los retos que rodean al suministro y la distribución de agua no han cambiado.