
Nos estamos quedando sin tiempo y sin opciones
Lo mismo que con el agua.
Por fin alguien hace una petición para mejorar la red de distribución y el suministro de agua.
La ha realizado Dawn en Pakistán.
La proliferación de fenómenos meteorológicos extremos ha supuesto una reducción de las nevadas del 26 %. El suministro de agua proviene del deshielo.
Así pues, los embalses se agotan y la energía hidroeléctrica que generan es inexistente.
El río Indo está a un 40 % de su caudal normal.
La agricultura está en peligro.
Todos se lamentan de que «ningún gobierno ha mostrado urgencia alguna para abordar el reto colosal que plantea la alimentación y la seguridad económica a largo plazo de los 220 millones de habitantes del país». La crisis actual debería ser una llamada de atención para las autoridades federales y provinciales. Ya es hora de que evalúen el mayor desafío al que se enfrenta Pakistán y elaboren políticas integrales para mejorar la gestión del sector del agua, construyan embalses para épocas de escasez y mejoren las infraestructuras de distribución de agua. Las autoridades deben darse cuenta de que nos estamos quedando sin tiempo y sin opciones, al igual que nos estamos quedando sin agua».
Lamentablemente, existen pocos precedentes de legislación y medidas previstas para evitar estas crisis. Todo apunta que la situación podría ir a peor si no se pone remedio.
Foto de AhsaAn Alii bajo licencia Creative Commons.